jueves, 16 de julio de 2015

TAXONOMÍA DE CAPACIDADES APLICADA A LAS MATEMÁTICAS

MIGUEL ÁNGEL LUENGO GARCÍA

El objetivo de este trabajo es tratar de obtener una clasificación de las capacidades cognoscitivas aplicada directamente a las Matemáticas, partiendo de la enunciada con carácter general por Bloom (1956). Las capacidades afectivas también se mencionan, aunque reduciéndolas a las que son menos difíciles de observar en la clase.


La taxonomía de Bloom, también llamada “Taxonomía de objetivos de la educación”, es la clasificación que realizó Benjamín Bloom, que incluye los diferentes objetivos y habilidades que los docentes podemos proponer a nuestros alumnos para alcanzar todos los estándares de aprendizaje que les planteemos. Dentro de ella se identificaron tres dominios de actividades educativas: el cognitivo, el afectivo y el psicomotor. Esta clasificación es jerárquica, es decir asume que el aprendizaje a niveles superiores depende de la adquisición del conocimiento y habilidades de ciertos niveles inferiores.
Taxonomia de Bloom | Tiching
Cuando programemos nuestras asignaturas y clases tendremos en cuenta estos niveles y mediante diferentes actividades, los alumnos deben ir avanzando de nivel hasta conseguir alcanzar los niveles más altos de la escala. Dentro del nivel cognitivo encontramos los siguientes niveles de menor a mayor, y para los cuales os proponemos algunas actividades para trabajar con los alumnos en el área de matemáticas:
Recordar
Reconocer y traer a la memoria información importante de la memoria a largo plazo del alumno. Algunos verbos indicadores de este nivel serían reconocer, listar, describir, recuperar, localizar
Al principio de cada bloque temático se puede proponer a los alumnos una “rutina de pensamiento”, del estilo “Veo, pienso, me pregunto”, para ver sus conocimientos previos acerca del tema a estudiar. También los alumnos pueden ir realizando Flashcards de los conceptos que se vayan introduciendo relacionándolos con conceptos ya aprendidos.
Comprender
Construir significado a partir de las explicaciones del profesor o de la propia investigación del alumnos. Algunos verbos indicadores serían interpretar, ejemplificar, clasificar, resumir, comparar
Una vez explicado el contenido, los alumnos pueden realizar alguna destreza de pensamiento propuesta por Robert Swartz para darle significado al contenido aprendido y poder asimilarlo de forma efectiva a través de la metacognición. Una destreza muy útil es la de “Comparar y contrastar”, en la que el alumno piensa sobre las semejanzas y diferencias significativas de dos o más conceptos aprendidos.
Aplicar
Poner en práctica un proceso recién aprendido, ya sea en una situación familiar o en una nueva. Algunos verbos indicadores que nos pueden ayudar a plantear actividades serían ejecutar, implementar, usar, desempeñar,
Dentro de este nivel entran todas  las actividades manipulativas que se nos ocurran para poner en práctica lo aprendido, desde juego con dados y cartas, actividades en cuadernos interactivos, actividades digitales,… Es importante que dichas actividades no sean solo individuales sino que introduzcamos actividades cooperativas en las que entre en juego la interacción con compañeros.
Analizar
Pensar en cómo se relacionan cada una de las partes del conocimiento recién adquirido con el objetivo global planteado. Algunos verbos indicadores serían diferenciar, organizar, comparar, enlazar,…
Podemos poder a los alumnos que elaboren mapas mentales en los que enlacen todos las partes aprendidas con el objetivo general planteado. Otra buena forma puede ser proponiendo a los alumnos realizar dibujos utilizando la técnica de visualthinking en la que se engloben y enlacen todas las partes.
Evaluar
El alumno realizará juicios a través de la comprobación y crítica de lo aprendido, valorando cada uno de los objetivos o habilidades propuestas. Algunos verbos indicadores para trabajar este nivel serían comprobar, criticar, revisar, probar, detectar,…
Muchas veces identificamos la palabra evaluar con la de realizar exámenes. En este caso es importante la autoevaluación y la coevaluación de los alumnos. De esta forma, fomentaremos la capacidad crítica y los alumnos detectarán más rápidamente el nivel de consecución de los objetivos planteados. Lo podemos realizar a través de semáforos de evaluación, dianas de evaluación, rúbricas,… También los alumnos pueden realizar vídeos explicando conceptos aprendidos y después realizar el visionado de los mismos en gran grupo realizando del feedback correspondiente.
Crear
Juntar todos los elementos del proceso para hacer algo nuevo de forma coherente y funcional. Para llevar a cabo este proceso creativo los alumnos deben generar, planificar, producir, diseñar, idear, elaborar, transmitir,…
Al final de cada bloque de contenido podemos proponer a nuestros alumnos que diseñen o produzcan algo relacionado con lo estudiado en lo que pongan en práctica cada uno de los niveles anteriores. Desde un juego de mesa, una exposición práctica, una presentación digital con todos los contenidos o incluso que sean los propios alumnos los que diseñen el examen o control de evaluación de dicho bloque de contenido teniendo en cuenta todos los puntos.
La labor docente puede centrarse en guiar a los alumnos en cada uno de los niveles que se proponen para lograr alcanzar el nivel más elevado que le llevará a la comprensión completa del bloque de contenido estudiado. El alumno es parte activa del proceso, construye su propio aprendizaje con ayuda no solo del maestro sino de sus compañeros a los que siente cercanos.

Fuente: Dialnet, Taxonomia de habilidades aplicada a las matematicas.

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